Windows 10 incluye una utilidad para ayudarnos a ahorrar espacio en disco.
Si disponemos de bastante espacio en disco, no es necesario realizarlo, pero imaginaros el siguiente escenario:
Disponéis de una unidad con poco espacio, y tenéis instalado el sistema operativo Windows 10. Por ejemplo, una unidad SSD, de 120 GB, donde tenéis los programas instalados, el sistema, y alguna que otra cosa. Otra posibilidad es disponer de un laptop con poca capacidad de almacenamiento, o equipo con pocos recursos.
Mediante esta técnica desde Windows 10, podremos ahorrar espacio en disco, comprimiendo los archivos del sistema, sin afectar casi nada al rendimiento del equipo. Con los comandos siguientes el sistema operativo se compacta o comprime. Esta técnica es similar a WIMboot en Windows 8.1.
La compresión conocida como Compact OS es soportada por instalaciones sobre BIOS o UEFI.
Para ello tendremos que realizar lo siguiente…
Ejecutamos un CMD como administrador. Un cmd es un interprete de comandos.
Una vez en línea de comandos, ejecutamos:
compact /compactos:query
De tal forma, verificamos si, el sistema se encuentra comprimido. En mi caso, como lo tengo comprimido, la imagen superior indica que se encuentra en estado compacto. Pero vosotros seguramente no.
Para comprimir los archivos del sistema ejecutamos:
compact /compactos:always
Este proceso tardará en función del sistema y potencia del equipo. En mi caso me ha tardado sobre la media hora.
Al finalizar el proceso, he ahorrado 4GB (menos es nada). La ventana muestra un resumen y el ratio de compresión alcanzado.
Importante: Antes de ejecutar este comando, aunque no suela pasar nada, es recomendable realizar una copia de seguridad del sistema.
Si en cualquier momento queremos revertir el cambio, aunque no es necesario, podemos ejecutar en otro cmd con permisos de administrador.
compact /compactos:never