Vivimos en una época de cambios, uno de ellos, relacionado con el tecnológico, es la tendencia existente a usar la nube cada vez más. Uno de esos servicios más difundidos es el almacenamiento de datos remotos usando la red de Internet. Datos que no se encuentran ubicados en nuestros ordenadores, tablets o smartphones, sino externalizados en entidades ubicadas en diferentes partes del mundo, datacenters de empresas.

Gracias a estos servicios, podemos disponer de la información en todo momento y lugar, desde cualquier dispositivo, beneficiándonos de las capacidades ofrecidas por estas empresas. Ahorramos pues espacio en disco, en pro de usar la red de Internet cada vez mas.

Pero no todo son maravillas. El hecho de dejar nuestra información las 24h del día los 365 días al año, supone una serie de riesgos que debemos estar dispuestos a asumir. También el cambio de mentalidad que supone dejar datos sensibles a empresas aunque aseguren la confidencialidad, integridad y disponibilidad de los mismos.

En mi opinión, aunque disponen de altos niveles de seguridad algunos de ellos, tendremos que seleccionar bien qué tipo de información estamos dispuestos a dejar en la nube o cloud. Ya que una vez realizado esto, todo pueden ser ventajas. Sobre todo en dispositivos móviles donde la capacidad es más limitada, podemos tener apps que acceden a nuestros datos ubicadas en discos duros en Internet.

También puede ser interesante, intercambiar información entre diversos dispositivos usando el disco en la nube como unidad “NAS”, para compartir información con terceros, o con nosotros mismos. Imaginemos el hipotético caso de tener un disco SSD de poca capacidad, podríamos usar estas unidades para tener más espacio. La copia de seguridad es otra característica que ofrecen.

Otra gran utilidad que se suele dar a estos servicios, es la posibilidad de ofrecen de almacenar copias de seguridad de aplicaciones SAS u orientadas a la web. Por ejemplo, podríamos programar la copia de nuestro blog, datos y web en un servicio externo en la nube. De hecho existen muchos plugins que posibilitan esto.

Para usar los servicios de almacenamiento en la nube, es necesario disponer de un software instalado en el dispositivo u ordenador. Lo que se conoce como cliente o app para smartphones.

Las grandes empresas se han dado cuenta de la importancia del almacenamiento cloud, y todas se han subido al carro ofreciendo sus clientes con capacidades gratuitas en principio y de pago.

Por ejemplo, Microsoft con su Windows 10, ofrece Onedrive con 16 Gb gratuitos de almacenamiento y cliente ya instalado por defecto en el sistema operativo. Apple lo hace también con su iCloud, aunque con menos capacidad gratuita (5GB). Google con su Google Drive, también ofrece los 16 Gbs.

En esta entrada voy a comentar principalmente 4 servicios de los que considero posee un mejor cliente y prestaciones.
Me quedo con Google Drive, Dropbox, OneDrive y Mega. Este último es el que ofrece más capacidad gratuita (50GB) y alguna que otra opción relacionada con la seguridad realmente sorprendente.

Estos clientes los podemos instalar para PC, GNU/Linux o Mac desde sus respectivas webs. También podemos hacer lo mismo con las apps para dispositivos móviles.

Como muestra de lo que digo, y a modo demostración que he probado estos clientes, os dejo una imagen que ofrece otra perspectiva, que al menos ni he apreciado en Internet, de las aplicaciones corriendo de fondo, a modo de procesos y con los respectivos controles VXD corriendo todos a la par, pero sin sincronización activa. Todos ellos corriendo sobre un Windows 10 64bits.

La imagen muestra que el cliente Onedrive de Microsoft (puede ser que debido a que corre sobre su propio sistema), es la que menos consumo de recursos (memoria) hace. Las que más consumo ofrecen son Dropbox y GoogleDrive. Mega posee un consumo razonable.

Es curioso observar que aunque Dropbox sea la aplicación que se encargó de popularizar y emprender almacenamiento en la nube, su cliente sea el que más consuma. Más adelante hablare de las características de cada cliente y sus ventajas, que las tiene, pero es un dato a tener en cuenta. Es precio que intenten optimizar estos aspectos, que pasan desapercibidos pero que pueden provocar que el sistema sea más lento.

He mencionado antes el término “Sincronización”.

Es la característica de tener a la par datos en la nube y locales de forma idéntica. Es decir, si cambiamos un archivo local, este se subirá a Internet, para dejar la copia exacta.

Como es de suponer, esta característica supone espacio en disco local, en caso de los equipos  no suele ser tan problemática debido a las mayores capacidades.

Todos estos clientes funcionan con una carpeta local que hace las veces de unidad de la nube, de forma que lo que dejemos en estas carpetas se irá transmitiendo de forma paulatina mediante sincronización a la nube. Esto supone un consumo de recursos. Es necesario mencionar que en líneas ADSL, el proceso de subida es bastante largo si trabajamos con archivos grandes.

Por lo tanto cada cliente posee su propia carpeta local, generalmente ubicada en la carpeta users. Y podemos tener varios como he demostrado anteriormente ejecutándose a la vez.

En Dropbox sería así, aunque se puede cambiar.

C:\Users\golden\Dropbox

Las principales características de los clientes cloud se podrían resumir en capacidad, velocidad, ancho de banda, seguridad principalmente. En función de estos parámetros tendremos que elegir uno u otro.

CARACTERÍSTICAS COMUNES

Los 4 servicios que he empleado se encuentra en castellano. Poseen opciones comunes. Todos ellos cuando se efectúa una sincronización el icono de la barra de tareas sufre cambios, e informa del estado de la subida o bajada. También si otros usuarios han añadido datos, a modo de aviso notificación o Tooltip.

Una vez instalado, el inicio al arrancar el sistema y las actualizaciones automáticas suele estar activas.

Todos ellos suelen mostrar el espacio ocupado, el libre y un acceso rápido para abrir el navegador si deseamos gestionar más cosas desde el backend ofrecido desde la web.

Una vez instalados, nos preguntan qué carpetas deseamos sincronizar con la nube, por defecto sincronizarán todas aquellas que cada instalador considere oportunas.

Clientes como dropbox y Onedrive, poseen opciones de subir documentos e imágenes a la carpeta remota, guardando automáticamente fotos y vídeos cada vez que se conecte una cámara de fotos, un Smartphone u otro tipo de dispositivo al ordenador. También posibilita guardar automáticamente las capturas de pantalla que se hagan.

El ancho de banda tanto para la subida como para la descarga también puede ser controlado, hay que considerar que como puede ser alto, podremos limitar la velocidad para evitar secar nuestra conexión. Esta opción es similar a los programas de compartición y descarga como torrents, etc.

Todos poseen la opción de Proxy. Pero,
¿Qué es un Proxy y cómo podemos usarlo con estos programas?

Un proxy no es más que un ordenador intermedio que permite la comunicación. En muchos casos para evitar anonimato u ocultación, en otros para acelerar la descarga, ya que no es necesario ir al sitio destino a por los datos, si ya se encuentra almacenados en el proxy. Por lo tanto, si hemos establecido un proxy, muchos de las descargas o datos se quedarán en el proxy y no tendremos que descargarlos de nuevo. Actúa de memoria llamada cache.

Estos proxies actúan bajo unos protocolos. Por ejemplo, Dropbox es compatible con proxy tipo HTTP, SOCKS4 y SOCKS5. Siendo necesario en cuyo caso establecer un puerto TCP siendo este el 8080. También como medida de seguridad los proxies suelen necesitar usuario/contraseña.

Además los clientes para Smartphone suelen contar con otro tipo de cache local. En algunos casos configurable, que evita tener que descargar documentos ya bajados previamente. Imaginemos que depositamos un PDF de 40 Mbs, gracias a esta cache no tendríamos que descargar de nuevo el documento. Es necesario precisar que muchos de ellos admiten contraseña de acceso a estos documentos y poder visualizar directamente archivos del tipo docx, PDF, videos, etc. También elegir si deseamos descargar los datos usando WIFI o nuestra tarifa de datos.

Vuelvo a hace hincapié que muchas opciones de compartición y permisos, se encuentra solo disponibles desde los backends de las webs.

Para finalizar me ha sorprendido mucho la seguridad ofrecida por MEGA, así como la capacidad gratuita ofrecida. Existen usuarios algo reacios a usar este servicio de la nube por la asociación con el desaparecido Megaupload. No obstante Mega deja bien claro que los datos compartidos de carácter ilegal serán eliminados. Este tipo de cosas pueden pasar con los otros gestores de datos. El Backend de Mega es bastante potente, también el ofrecido por Dropbox. La seguridad de Mega mediante claves, y almacén de clave maestra destaca sobre el resto.

Muchos usuarios pueden compartir contenidos en Mega, Dropbox, con el resto de usuarios. Por eso es importante aclarar que dependerá de la responsabilidad de los usuarios principalmente que cosas comparten.

Ojo, existen otras alternativas que menciono, así como los posibilitados por proveedores de servicio, empresas de hosting, etc, que forman parte de sus productos.

Pero he tratado las 4 superiores por ser las más extendidas y sus clientes para Windows.

Copy.
pCloud.
Tresorit
Box
MediaFire
Apple iCloud
Mozy
Kownhow Cloud
Spideroak
Amazon Cloud Drive

Además de la existencia de un software como servicio como owncloud, para montarte tu propia nube.