Active Directory (AD) es el pilar central de muchas infraestructuras empresariales. Sin una gestión adecuada, puede convertirse en un punto débil de seguridad y administración. Aquí tienes 10 consejos esenciales para optimizar su uso.
1. Organiza las Unidades Organizativas (OUs) desde el principio
Una estructura bien diseñada facilita la administración y aplicación de políticas. Evita colocar usuarios y equipos en las carpetas predeterminadas como “Users” y “Computers”. Crea OUs basadas en departamentos, ubicaciones o funciones para una mejor gestión.
2. Optimiza el uso de las Políticas de Grupo (GPOs)
Las GPOs permiten configurar y aplicar reglas en AD, pero si se usan en exceso pueden ralentizar el inicio de sesión y generar conflictos. Aplica GPOs en la menor cantidad de niveles posible y utiliza el filtrado por grupos de seguridad para mayor control.
3. Aplica el Principio de Mínimo Privilegio
No otorgues permisos administrativos sin necesidad. En lugar de asignar privilegios directos, usa grupos de seguridad y delegación de permisos en OUs para restringir accesos de forma precisa.
4. Activa Auditorías para Controlar Cambios
Es fundamental monitorear cambios en cuentas, permisos y accesos. Activa la auditoría de eventos en AD y revisa logs en Event Viewer. Herramientas como Microsoft Defender for Identity pueden ayudarte a detectar actividades sospechosas.
5. Implementa Autenticación Multifactor (MFA)
Las contraseñas por sí solas no son suficientes. Usa MFA para agregar una capa de seguridad extra, especialmente en cuentas con privilegios elevados. En entornos híbridos, Azure AD MFA es una excelente opción.
6. Refuerza las Políticas de Contraseñas
Configura políticas de contraseñas fuertes mediante GPOs o PSO (Password Settings Objects). Requiere contraseñas complejas, cambios periódicos y evita reutilización de credenciales.
7. Deshabilita Cuentas Inactivas Automáticamente
Las cuentas sin uso son un riesgo de seguridad. Usa PowerShell para identificar y desactivar cuentas inactivas después de un periodo determinado, asegurando que solo las cuentas activas estén operativas.
8. Mantén Active Directory Actualizado
Actualiza regularmente los controladores de dominio y aplica parches de seguridad para evitar vulnerabilidades. Verifica periódicamente la replicación entre servidores AD para garantizar la coherencia de los datos.
9. Usa la Estrategia AGDLP para la Gestión de Grupos
Evita asignar permisos directamente a usuarios. Implementa AGDLP (Accounts -> Global Groups -> Domain Local Groups -> Permissions) para gestionar accesos de manera eficiente y escalable.
10. Realiza Copias de Seguridad y Pruebas de Restauración
Un fallo en AD puede afectar toda la organización. Realiza backups del Estado del Sistema usando Windows Server Backup o herramientas como Veeam. Además, prueba la restauración regularmente para asegurarte de que funciona correctamente.
Conclusión
Siguiendo estos consejos, mejorarás la seguridad, estabilidad y eficiencia de Active Directory. Una gestión proactiva evitará problemas y facilitará la administración a largo plazo. ¡Implementa estas prácticas y fortalece tu infraestructura de TI!