Durante años, en el sector informático hemos caído una y otra vez en lo mismo: hablar desde el producto, no desde el lector.
Hablamos de frameworks, APIs, ancho de banda, bases de datos…
Pero rara vez nos detenemos a pensar cómo suena eso para quien lo lee.
Y no me refiero a clientes. Me refiero a cualquier lector: un usuario, un decisor, un compañero de otro departamento o alguien que simplemente quiere entender si lo que hacemos le sirve para algo.
🎯 No vendemos specs. Comunicamos soluciones.
Es muy fácil escribir frases como:
🚫 “Aplicación multiplataforma con backend en Node.js y arquitectura de microservicios.”
Pero mucho más útil escribir algo como:
✅ “Funciona igual de bien estés donde estés, desde cualquier dispositivo, sin tiempos de espera.”
✍️ Hablar desde el lector cambia todo
Cuando redactamos pensando solo en el sistema, terminamos escribiendo para nosotros mismos.
Pero cuando lo hacemos desde el punto de vista de quien va a usar, integrar o aprobar lo que hacemos, todo cambia.
Aquí dejo varios ejemplos de cómo suelo reformular ciertos mensajes técnicos:
🚫 “Infraestructura escalable y redundante en múltiples zonas de disponibilidad.”
✅ “Aunque el tráfico se dispare, tu servicio seguirá funcionando sin caídas.”
🚫 “Base de datos replicada con backups automáticos y cifrado AES-256.”
✅ “Tus datos están seguros. Y si pasa algo, puedes recuperarlos en minutos.”
🚫 “Monitorización activa con alertas por webhook y correo.”
✅ “Si algo falla, lo sabrás al instante. Y no necesitas estar pegado a una pantalla.”
🚫 “Soporte para múltiples entornos con integración continua.”
✅ “Pasa de desarrollo a producción sin dolores de cabeza.”
🔧 ¿Cómo lo aplico yo?
Cuando tengo que escribir sobre una herramienta o servicio que conozco, intento hacerme una sola pregunta:
¿Qué le cambia al lector si esto funciona como digo?
Y si la respuesta es clara, sé que tengo una frase con más fuerza que cualquier listado de características.
🧩 La tecnología no desaparece. Solo cambia de lugar.
No se trata de ocultar lo técnico. Se trata de ponerlo en contexto.
El lector siempre puede profundizar si quiere saber más. Pero primero necesita entender para qué sirve.
Y sobre todo, por qué debería importarle.
✨ En resumen
No es que tengamos que dejar de hablar como técnicos.
Es que necesitamos empezar a escribir como si del otro lado hubiera una persona, no un compilador.
Porque quien lee, quiere entender.
Y muchas veces, también quiere confiar.
La forma en que escribimos puede ayudar a ambas cosas.
¿Te ha pasado esto al escribir documentación, una página de producto o un README?
Yo todavía me sorprendo reescribiendo párrafos que escribí como si hablase con mi terminal.